Con el levantamiento de ciertas restricciones debidas al confinamiento por Covid-19, acudimos varios de nosotros nuevamente a la llamada de Carlos Madrigal, para pasar revista a nuestras unidades sloteras, que ya estaban necesitadas de «ver un poco de mundo».
Con argumentos convincentes como «más espacio, y unas brasas para hacer cordero y embutido», los asistentes quedamos convencidos desde el minuto 1 de que iba a ser el Sábado perfecto. En la primera parte del día, nos encontrábamos: Don Vicente, Don Julio, Don Carlos, y el que escribe (Nótese el uso extensivo del tratamiento «Don», la camaradería y el respeto son norma fundamental del slot, máxime cuando uno comparte circuito con verdaderas eminencias de esta disciplina).
Así que nos dedicamos a lo que mejor se nos da: darle al gatillo desde el principio para cogerle el pulso al excelente trazado que Carlos diseñó y puso a nuestra disposición. Esta foto da una buena idea del excelente circuito. Impecable.
Fieles además a nuestra filosofía de reglamento libre: cualquier coche es bienvenido en pista, sea de la especificación que sea, mangas por eliminación, y rodar….. y rodar…. y rodar….. Impresionante despliegue de grupos 5 (algunos tenemos una edad ya, y se nota esas categorías que aún nos «tiran»)…. Y más de una sorpresa que nos tenía deparada Julio, como el Smart, el Jeep, o ese impresionante Mercedes que es todo un testimonio su buen hacer.
Tras el descanso obligado para comer, con un nivel de gastronomía de 10, y la compañía del padre de Carlos, dimos cuenta de las viandas, ensaladas, y líquidos hidratantes, para coger tono de cara a la tarde.
Luego, tras la comida, vendrían los refuerzos, con la aparición de Don Ángel, para contarnos peripecias vividas en el mundo del slot, y ejercer también de piloto, demostrando que «el que tuvo, retuvo». Más tarde Don Diego, con quien no tuve el placer de coincidir, ya que yo tuve que retirarme del evento en mitad de la tarde.
Cómo una imágen vale mal que mil palabras, ahí van mil imágenes para sintetizar un Sábado perfecto de slot, en el que además hemos abrazado con entusiasmo una nueva variante: el «caravaning».
Clica aquí para alucinar con el caravaning en acción
Y como guinda al día, Julio también quiso poner a prueba la resistencia de los Cartrix…. Parece que otro Cartrix pasará por enfermería, y en comparación con el choque que tuvo Vicente en su día, este incidente no tiene nada que envidiarle.
A continuación, y como guinda, todo el lote de tomas fotográficas, para que ninguna se quede en el tintero. Espero de veras que os haya gustado. Hasta el siguiente artículo.
Que pena no poder asistir, pero veo que fue un día memorable, un saludo a todos
Me gustaLe gusta a 1 persona